Y la fantástica ambición argentina de ser millonario de la noche a la mañana.
Por: Laura Pereyra – Lic. en Comunicación idónea de Mercado de Capitales
Poco es el margen que ha quedado para la certidumbre, promediando la primera semana post Paso y de cara a lo que pueden ser los 60 días más intensos del año. Se ha intentado llevar algo de calma (¿?) estableciendo un precio fijo para el dólar mayorista hasta octubre de este año en $350 y una suba de 21 puntos para el premio por inmovilizar pesos, que pasó del 97% a 118% en plazos fijos. Hasta el momento lo que se ha mantenido estable, es la volatilidad. Y como dice el dicho, a río revuelto ganancia de pescadores.
Para los más adeptos al mundo financiero, rápidamente quedan a la vista las oportunidades. Los famosos “desarbitrajes” de precios florecen fugaces y sólo son aprehensibles para quienes tienen una herramienta básica: liquidez en sus carteras. Como la red de esos pescadores, la disponibilidad de fondos es lo que más necesita un argentino para atravesar las intrincadas aguas de estas semanas.
Imagínense cuando bajan los precios de esos activos que tienen mucho valor, pero que hace rato venían manteniéndose firmes. Momentos donde bajan las empresas que más nos gustan (acciones) o bajan esos terrenos que estuvimos viendo, o esos departamentos en venta. Cuando el consumo se desacelera pero quien vende está urgido de hacerse de efectivo. La oferta a mejores precios aparece y ¡guarda que nos agarre desprevenidos y sin fondos! Atravesar por ese mar de opciones, pero sin contar con el dinero líquido necesario para aprovechar la oferta, no sirve.
Aparecen a su vez, oportunidades asociadas a la llamada “bicicleta financiera”, donde portales y diarios comentan con simpleza qué bobo es aquel que no aprovecha a comprar dólar mep en blanco, retirarlos por el Banco y venderlos en el mercado ilegal del paralelo para con eso volver a comprar los dólares nuevamente por Banco. A prueba de sonsos, ¿no? Y ahí va la manada haciendo caso omiso a normativas y a peligros fiscales. Cruzando blanco, negro, azul…. Cualquier color sin prever que algunas oportunidades son mejores no tomarlas. Evitarse un dolor de cabeza, amigo lector, también es hacer un buen negocio e invertir a futuro.
Los invito a pensar en esos 21 puntos de premio por inmovilizar. A un “plazofijista” hoy le pagan 9.83% mensual de tasa. Contra una inflación esperable de dos dígitos para el mes de Septiembre según muchos de los analistas económicos consultados nos hace replantearnos la pregunta: “¿Y si esa tasa ya nació vieja?”. De esto hablamos cuando pensamos en cuál es el costo de oportunidad que tenemos al inmovilizar. ¿Alcanza acaso para tentar a quienes se quieren arriesgar a que nada más cambie en estos 60 días?
Más que pensar en las inversiones posibles -de esas que todos buscamos para no trabajar nunca más en la vida según ciertos telares de la abundancia- más me preocupa que los argentinos no se endeuden siendo éstos los nuevos niveles de tasa. Sinceramente hay mucho desconocimiento sobre el uso responsable de tarjetas de crédito y del gasto doméstico por parte del público en general. Más de un “tarjetahabiente” (no importa el nivel académico al que haya llegado en su vida) hace «rollover» de su propia deuda pagando un poco más del mínimo y pateando para adelante esos pesos que se van acumulando.
No los veo a los “gurúes” financieros tan preocupados por alertar y aconsejar sobre las altas tasas de morosidad a las que se pueden incurrir tanto personas como empresas con deuda acumulada a tasas extraordinarias. El río seguirá revuelto y serán los Bancos y empresas financieras las que tirarán grandes redes para agarrar desprevenidos. Está buenísimo invertir (y ahí vamos con las sugerencias), pero siempre partiendo de administraciones prolijas.
Con una brecha nuevamente empatando el 109% (medidas mediante, la cosa con el dólar financiero sigue igual) vamos a pensar en diversificar carteras de inversión con activos que se aten a la divisa y quienes puedan, deberían considerar colocar un porcentaje de su ahorro en Cedears o dólar mep sencillamente. Sostener esos dólares comprados a estos precios si es que van a querer inmovilizar pesos hasta fin de año. Los Cedears los buscaremos siempre entre empresas de valor. PepsiCo, Berkshire Hathaway o el índice DIA (Dow Jones Industrial) pueden ser una alternativa de espera, sin pasar a activos tecnológicos de mayor volatilidad.
Y si quiero mantenerme con pesos, sin inmovilizarlos tanto tiempo pero absorbiendo una tasa similar a la del plazo fijo sugiero que utilicemos una porción en un Fondo Común de Inversión de rescate 24 horas. Tasas arriba del 110% pero priorizando la liquidez que es lo que manda. Si vemos que vienen tormentas muy complicadas, sencillamente rescato hoy y para mañana ya puedo cambiar de estrategia.
Les dejo un consejo, parafraseando un informe que recibí esta semana: No caigan en el grave error de intentar ponerle un límite al valor real del dólar en medio de una crisis de nominalidad. ¿Cuánto debería valer el dólar en seis meses si pensás en que lo que se viene es una espiralización de la inflación?¿Cuánto valdría si quien gane en octubre plantea dolarizar la economía? No pinten escenarios que aún no están claros, faltan datos aún que no tenemos. No las vamos a acertar en todas. Diversificación y feliz fin de año.