La economía que viene: ¿cuáles son las reformas prioritarias?

La economía que viene: ¿cuáles son las reformas prioritarias?

Pablo Guido es licenciado en Ciencias Políticas, Economía y doctor en Economía. Compartió con IMPACTO ECONÓMICO su visión sobre dos directrices centrales: los pasivos económicos del gobierno saliente y las reformas prioritarias.

PRINCIPALES PASIVOS ECONÓMICOS QUE DEJA LA GESTIÓN K DE ALBERTO FERNÁNDEZ

La gestión kirchnerista, que acumula dos décadas de duración (con excepción del paréntesis 2015-2019) si tuviera que definirla en pocas palabras serían las siguientes: un modelo de saqueo al sector privado (vía impositiva o inflacionaria), con el objetivo de expandir de manera exacerbada y obscena los subsidios a distintos grupos de la sociedad para de esa manera “comprar” voluntades electorales. El resultado ha sido dejar un país descapitalizado de manera significativa, como consecuencia de la falta de ahorro e inversión necesaria. Esta descapitalización tiene como efecto menores ingresos en términos reales, mayor pobreza, menores niveles educativos y de salud, deterioro profundo de la infraestructura.

Asimismo, podemos mencionar un nivel récord de gasto público, de presión tributaria, de deuda pública, un Banco Central quebrado también por el saqueo del gobierno a las reservas. También un sistema de precios totalmente distorsionado por los innumerables esquemas de controles de precios (bienes y servicios de la canasta de consumo, tarifas y tipo de cambio), un esquema regulatorio que hace prácticamente inviable el crecimiento económico y el aumento del empleo privado, entre los elementos
más destacados.

REFORMAS PRIORITARIAS PARA ESTABILIZAR LA ECONOMÍA Y GENERAR INCENTIVOS PARA LA
INVERSIÓN Y GENERACIÓN DE EMPLEO

El próximo gobierno tendrá que llevar a cabo dos programas paralelos y de manera simultánea: un plan de estabilización y un plan de crecimiento económico. En el primer caso deberá ordenar las cuentas públicas bajando el gasto y la carga tributaria, a la vez que disminuya también el déficit fiscal. En el segundo caso deberá eliminar todo el esquema de controles de precios existente (bienes, servicios, tarifas y tipo de cambio) para permitir reestablecer un sistema de precios sano, reducir y/o eliminar regulaciones a los mercados de productos y trabajo, abrir la economía a la competencia mundial, volver a tener una moneda, rediseñar el esquema tributario reduciendo y eliminando impuestos, pero también simplificándolo. Enorme desafío le espera al gobierno electo.