La demanda internacional de energía y el potencial de Vaca Muerta conforman un binomio que representa una oportunidad de desarrollo excepcional para la Argentina. Los desafíos para las empresas, el ambiente de negocios necesario, las áreas de mejora en la cadena de valor, la visión sobre el futuro de la energía, el posicionamiento de Shell en Vaca Muerta y los 110 años de la empresa en Argentina fueron parte del diálogo que IMPACTO ECONÓMICO compartió con Ricardo Rodríguez, presidente de Shell Argentina, Chile y Uruguay.
¿Cuál es el posicionamiento actual de Shell en Vaca Muerta?
Vaca Muerta es el foco de nuestras operaciones en Argentina. Operamos cuatro bloques (Sierras Blancas, Cruz de Lorena, Coirón Amargo Sur Oeste, con GyP de socia, y Bandurria Sur, con YPF), todos ellos en desarrollo masivo, y tenemos participación en otros tres bloques, con YPF y TotalEnergies como socias operadoras. Estamos produciendo alrededor de 55 mil barriles equivalentes diarios entre 35.000 barriles en bloques operados y 20.000 en no operados, lo que nos convierte en una de las empresas líderes en producción de crudo no convencional en el país. Hemos realizado el primer oleoducto de inversión 100% privada en la cuenca junto a PAE y Pluspetrol el año pasado y tenemos en funcionamiento dos plantas de procesamiento de petróleo en Sierras Blancas y una tercera en construcción en Bajada de Añelo. Llevamos invertidos más de 3.000 millones de dólares, multiplicamos diez veces nuestra producción en los últimos cinco años y queremos invertir para seguir creciendo.
¿Y con respecto a los planes de la empresa para este año?
Este año es muy importante para el sector porque tenemos la oportunidad de demostrar el aporte que ya generamos a la economía del país y el que podríamos generar dadas las condiciones adecuadas. Después de varios años, revertiremos la balanza energética. Aportaremos divisas a la economía argentina por partida doble: cada vez que reduzcamos importaciones y cada vez que aumentemos exportaciones. Es un hito del que toda la industria debe estar orgullosa.
¿Cómo evalúa el impacto de la administración Milei en el sector energético?
Estamos todavía en el medio de una etapa de cambio en muchas condiciones y reglas de juego de la economía. Va a llevar algún tiempo entender su impacto sobre el sector y cómo posicionarnos mejor para contribuir al futuro de la energía en Argentina. Con las condiciones adecuadas, Vaca Muerta y el sector energético en su conjunto pueden ser el motor de desarrollo para el país. Shell está presente en Argentina desde 1914, cumplimos 110 años en septiembre. Tuvimos actividades en todos los contextos políticos, económicos y sociales, siempre motivados por el mismo compromiso de contribuir al desarrollo energético y económico del país.
¿Qué necesita el sector para aumentar la producción y exportación de petróleo y gas?
Las empresas tenemos que seguir trabajando en brindar competitividad a nuestras actividades, aplicando tecnología, innovando en mejores prácticas y reduciendo costos logísticos y operacionales. Después está el entorno de esas actividades. En ese plano, los inversores necesitan ver que hay acceso a divisas y precios internacionales, y un marco macroeconómico y regulatorio estable, previsible y sustentable a largo plazo. Eso nos va a dar más capacidad de demostrar competitividad y seguridad a nuestras casas matrices para disputar mayores inversiones para Argentina dentro de nuestro portfolio global.
El desarrollo de Vaca Muerta para Argentina ya es una realidad. Más de la mitad del petróleo que genera el país proviene ahora del no convencional. La demanda doméstica de crudo ya está abastecida. El cuello de botella en infraestructura de evacuación está en vías de ser solucionado. El desafío ahora es realizar el potencial que el recurso tiene a escala internacional. Ir por el gran salto exportador.
¿Qué áreas de mejora identifica en la cadena de valor del Oil & Gas?
Todavía tenemos mucho para avanzar en ese terreno. Si queremos triplicar la producción actual hasta el millón de barriles por día, como indican que es posible algunas proyecciones, todas las operadoras tenemos que perforar muchos más pozos. Y para eso van a ser necesarios más equipos de fractura y completación que los que hay hoy en el país. Ese es el ejemplo más grande, pero en toda la cadena hay oportunidades para ganar escala y hacer más eficiente la actividad.
¿Cómo ve el futuro de la energía?
Es una muy buena pregunta. Shell ha sido y es pionera en el mundo precisamente por reflexionar siempre sobre esa pregunta y transformarse para el futuro que imagina en cada momento. Actualmente, vemos que el mundo va a necesitar que suministremos mucha más energía para abastecer a los hogares y los medios de transporte, en vistas al ritmo creciente de la población global, con niveles de vida cada vez más altos. Pero para contrarrestar el cambio climático, ese suministro de energía debe ser cada vez con menor contenido de carbono. Ese es nuestro compromiso, que está plasmado en Powering Progress (Impulsando el Progreso), nuestra estrategia global para liderar el camino de la empresa y del sector energético hacia la neutralidad de carbono.
¿Qué motivó el acuerdo que firmaron con Genneia?
A través del acuerdo que firmamos el mes pasado, vamos a abastecer nuestras operaciones de producción y consumo de pozos productivos con energías renovables de activos eólicos y solares de Genneia desde mayo y por un plazo de al menos siete años. Si bien nuestras actividades en Vaca Muerta son muy competitivas en términos de toneladas de CO2 por barril, en Argentina también queremos estar a la vanguardia de la transformación del sector que mencionaba recién y para eso estamos desplegando un ambicioso plan de descarbonización, en el que se enmarca el acuerdo. Entre otras iniciativas, avanzamos en la descarbonización de las emisiones de Alcance 2 en 2023, la eliminación de las antorchas rutinarias desde 2021 y el diseño eficiente de instalaciones de superficie centralizadas para reducir el consumo de energía. Así logramos una reducción del 60% en la intensidad de carbono de nuestras operaciones entre 2019 y 2023, consolidándonos como líder en la gestión del carbono en Vaca Muerta.
Para concluir, una reflexión sobre los 110 años de Shell en la Argentina.
Para Shell es un año muy importante. Estamos en el país hace 110 años y en Neuquén hace 12. Estamos entrando en nuestro segundo siglo en Argentina y nuestra segunda década en Vaca Muerta y eso nos brinda una posición privilegiada para estar a la vanguardia del futuro de la energía en el país, como estuvimos siempre. Tenemos la experiencia, el conocimiento, el compromiso y el equipo de talentos adecuado para la misión.
El perfil de Ricardo Rodríguez
Presidente de Shell Argentina, Chile y Uruguay desde el 1 de agosto de 2022.
En sus más de 20 años en la compañía, ha ocupado posiciones en diferentes proyectos de Upstream onshore y offshore, con experiencia en la adquisición de bloques, la planificación de proyectos de desarrollo y la ejecución y producción en operaciones.
También lideró la ingeniería petrolera y planificación de desarrollo para el portfolio de Shell Deepwater en América.
Recientemente, desempeñó tareas en la cuenca de No Convencionales de Permian, en los Estados Unidos.
Nació en Venezuela, donde vivió hasta el momento de su graduación como ingeniero químico por la Universidad Central de Venezuela. Posee también un máster en Ingeniería Química por la University of Southern California.