La opinión empresarial

La opinión empresarial

El sector privado productivo es el motor de la actividad económica. Parafraseando a Winston Churchill, es un brioso percherón que tira de un carro muy pesado. Ese pesado carro es un sector público sobredimensionado en los tres niveles de gobierno: nacional, provincial y municipal. La contrapartida es un esquema impositivo que asfixia a la actividad económica, además, el veneno de la inflación y la contaminación burocrática. En línea con nuestra línea editorial de poner en el centro de la escena a quienes producen, IMPACTO ECONÓMICO consultó a tres referentes del sector oil & gas, frutícola
y turismo. Las oportunidades que presentan dichos sectores en este nuevo escenario político y económico, y las reformas necesarias, fueron los ejes de sus opiniones:

TURISMO | Agustín Rocca, empresario hotelero; ex presidente de la Asociación Hotelera y Gastronómica de San Martín de los Andes.

Las oportunidades
Neuquén es un destino en pleno crecimiento turístico, que no tiene techo en el corto plazo. Con el acompañamiento de una mínima inversión estatal en mantenimientos de la infraestructura y creando oportunidades de inversión en las regiones a desarrollar, como por ejemplo, el norte neuquino. Puede ser un gran momento para que el turismo ayude a la economía provincial si saben acompañarnos.

Las reformas necesarias
A nivel provincial, las reformas consisten en lograr que nuestro banco abra y agilice las oportunidades de créditos al empresario Pyme. También, que desde el sector se siga acompañando con entes de inversión -como el CFI-, en la ayuda de presentaciones para acceder a créditos de inversión.
El empleo directo que genera el turismo como el primer trabajo para muchos jóvenes, y en adultos en edad de retiro, requiere de incentivos para la contratación de personal.

FRUTICULTURA | Mariano Tappatá, economista y CEO de PAI (Productores Argentinos Integrados).

¿Qué oportunidades presenta la actividad frutícola de la región?
Principalmente, las oportunidades para la fruticultura están atadas a la evolución macroeconómica del país y la competitividad global que tengan nuestras empresas. La demanda de alimentos y fruta fresca seguirá creciendo de la mano del crecimiento económico global. Del lado de la oferta, la región posee condiciones para producir fruta de alta calidad y a costos competitivos. Contamos con el clima, la tierra y el know-how, pero no es suficiente para ser competitivos.

En primer lugar, el avance tecnológico reciente permite que zonas con condiciones naturales desfavorables se incorporen a la producción de fruta de buena calidad, y que la ventana de exclusividad
del hemisferio sur sea cada vez más chica. En segundo lugar, es necesario que la economía doméstica y el desarrollo institucional acompañen a la actividad. En el Valle lo sabemos muy bien porque fuimos testigos del crecimiento exponencial que tuvo el sector frutícola en Chile y Perú como consecuencia de su estabilidad económica y políticas sectoriales.

¿Qué reformas se requieren para aprovechar estas oportunidades?
Considero que hay dos tipos de reformas. Por un lado, hay reformas que serían positivas para la fruticultura y la economía en general. Una reforma monetaria que elimine la inflación y permita el planeamiento financiero y comercial es indispensable. Otro ejemplo es la reforma laboral. Las empresas invertirían más si el marco de legislación laboral fuera más flexible. Uno de los frenos más importante al crecimiento es justamente reaccionar a cambios de mercado aumentando o reduciendo su fuerza de trabajo de manera rápida y sin costos extras.

Por otro lado, están las políticas que impactan en la competitividad de la fruticultura. El país debería realizar más acuerdos comerciales y protocolos fitosanitarios en mercados estratégicos, tener reintegro de impuestos a exportadores acordes a la presión fiscal interna, fortalecer instituciones como el INTA y
SENASA.

¿Cómo incentivar la inversión y generación de empleo formal?
Las reformas que mencioné son, justamente, necesarias para que haya inversión de largo plazo. Las variables que resumen el éxito de las mismas son el riesgo país y la tasa de interés que los
productores pueden conseguir para impulsar proyectos de inversión con 10-15 años de horizonte (actualmente esa tasa es infinita porque no hay acceso al crédito de largo plazo). El empleo formal aumentará como consecuencia de la mayor inversión y crecimiento en las hectáreas planteadas. No me parece que haya un problema grande de informalidad. Es decir, el crecimiento del empleo formal
se dará por mayor actividad, y no por reducción de la informalidad

OIL & GAS | Carlos Etcheverry, presidente de Texproil para Latinoamérica.

Oportunidades que presenta el sector
Las oportunidades que presenta el sector son muchísimas. Tanto para gas como para petróleo. Hay una gran ventana de oportunidad para el LNG y para aumentar la exportación de petróleo. Con un
entorno de negocios adecuado, la producción puede llegar al millón de barriles y exportar la mitad. Esto nos permitiría contar con ingresos del orden de los 40.000 millones dólares de exportación, equiparando a la soja.

La concreción de este escenario, a su turno, permitirá un crecimiento de la actividad, la generación de más puestos de trabajo, un efecto multiplicador en la región e incremento en la recaudación de
impuestos.

Reformas requeridas para potenciar al sector
Vaca Muerta se está desarrollando y creciendo. En noviembre de este año se rompió un récord: la producción de yacimientos no convencionales (shale Vaca Muerta) superó a la producción convencional.
Se requiere una reforma impositiva integral, un tipo de cambio competitivo para incentivar las exportaciones y libertad para girar dividendos.

Incentivos a las inversión y generación de empleo
Los incentivos se vinculan a las reformas estructurales. Se necesita más infraestructura. La previsibilidad, reglas de juego claras y estables resultan fundamentales en un sector en el que se requieren grandes inversiones con un período de recupero a mediano y largo plazo.
La estabilidad macroeconómica es condición necesaria para incentivar la inversión. Como señalé, un esquema impositivo amigable con la inversión es parte de los incentivos centrales que
hace falta recrear.

En lo relativo a la infraestructura, son necesarios más ductos para poder evacuar una mayor producción de petróleo y gas. También, una planta para exportar LNG. La expansión de la infraestructura vial es clave para desarrollar el potencial de Vaca Muerta.